Pecar contra tu boca, hasta matarme la locura...

viernes, 19 de febrero de 2010

****Veneno****


Inoculado en el centro de su sangre, en el punto justo donde sentía el corazón latiendo en su cuello. Ponzoña, pero no un veneno cualquiera, si no el más peligroso de todos. La falta de esperanza, la desesperación, la impotencia, la rabia que nubla sus sentidos, que los deja apartados dentro de su cuerpo, que los aplasta. Su vacío, ese que llena su pecho, si, porque hace mucho tiempo descubrió una frase que lo definió todo "no es más grande el que más llena, si no el que más vacío deja cuando se va". Además de todo esto, ya no siente su piel. No le hace falta. ¡Qué más da!


Su sangre, es ahora espesa, y espera que pronto acabe con todo lo que tiene dentro, está matando una a una todas las mariposas que un día invadieron su estómago, como okupas, y ahora sólo queda asesinarlas, es la única manera de echarlas de allí.


Pero eso otro día, hoy se concentrará en que el veneno no acabe con su vida, otro día más...

Otro día más...

1 comentario:

  1. Mientras más te leo, más recuerdo cómo me sentía hace unos meses. Sólo puedo decir: Que el tiempo todo lo cura.
    Un besote

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