Un roce, un ligero roce en mis caderas y me volveré loca, completamente loca.
Un beso, tu lengua tratando de pasar a través de mis labios, tu aliento, el olor inconfundible de tu piel.
Tu mirada, atravesándome como un cuchillo hundiéndose en la mantequilla, desnudándome.
Y yo, intentando saborear tus huesos... hasta el tuétano...
¿Algún día nos contarás tu historia?
ResponderEliminarUN besito :D