Pecar contra tu boca, hasta matarme la locura...

martes, 8 de junio de 2010

****Loca****



Loca. De atar. Como una jodida cabra. Y es que ya ves compañero. Sigo saltando en los charcos y bailando frente al espejo. Sigo haciéndome fotos cursis con el móvil. Me sigo emocionando con "Love Actually", "Ameliè" y "Moulin Rouge". Sigo sin creer en los finales felices. Sigo adorando a las hadas y a los vampiros (pero los malos de verdad, de ésos que desgarran gaznates sin una gota de remordimiento). Sigo bailando sevillanas cuando en realidad no tengo ni idea. Sigo leyendo la poesía de Baudelaire y Antonio Machado a escondidas porque los versos me suenan mejor en la voz que en la cabeza (manías estúpidas). Sigo adorando a mi hermana pequeña aunque a veces la odie mucho. Sigo deseando oler la calle después de una tormenta de verano, ese olor a asfalto mojado y la nieve el día 24 de diciembre y salir a caminar sobre ella recién caída mientras cruje bajo mis pies. Sigo bañándome en agua hirviendo. Sigo buscando la bondad dentro de la gente por mucho que mi madre intente convencerme de lo contrario. Sigo riéndome como una niña. Y sigo también mordiéndome por entero el labio inferior cuando estoy concentrada. Sigo luciendo unas ojeras moradas porque no consigo dormir bien. Sigo bebiendo cerveza aunque a veces me pase al vino.

Y por sobre todas las cosas, sigo queriéndote. Con cada fibra de mi ser, con cada vello de mi piel. Sigo amándote como el primer día, con todo el corazón, marchito, negro, rojo de sangre azul de mis venas púrpuras. Sigo viendo tus ojos azules cuando miro el azul celeste de mi cielo gris. Paradojas de arco iris. Y sigo sin cambiar nada, para ti y por ti.

Y sigo, una y otra vez...

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