Pecar contra tu boca, hasta matarme la locura...

jueves, 31 de marzo de 2011

Proyecto de adictos a la escritura Marzo


Me quedo mirándole fijamente, con esa sonrisa bobalicona que se nos pone a las madres primerizas cuando observan a su bebe dormir, porque, todo hay que decirlo, si están despiertos casi siempre están llorando. Pero ahí está. Mi pequeño. Dormido, ajeno a todo lo malo que pasa, a esta crisis, al terremoto de Japón, al conflicto de Libia… Y simplemente me gustaría que no se diera cuenta de lo cruel que es el mundo en ocasiones.

Respira pausadamente, como si cada aliento fuese una batalla en si misma, está aprendiendo a vivir. Y le tendré que enseñar a sobrevivir. Todavía me acuerdo de las patadas que me daba dentro del vientre, es fuerte. Será fuerte. Será lo que quiera. Quizá ahora está soñando lo que será de mayor, o puede que solo con sus peluches. No sé lo que le deparará el futuro, lo que me da bastante miedo.

Y yo no sé si seré una buena madre, porque él, lo está haciendo genial. Pero yo no sé si seré la indicada para que este bebe crezca y observando como están las cosas hoy en día a veces pienso que me equivoqué al traerle al mundo. Sin embargo en otras ocasiones me parece que es lo mejor que me ha pasado en la vida.

Ahora toca criarlo, verle dar sus primeros pasos, sus primeras palabras, su primer día de escuela. Y todo mientras este mundo que nos rodea se desmorona por completo y se cae a pedazos por culpa de la humanidad.

No obstante al observarle dormido creo que es una de las imágenes que merece la pena admirar. Y lo disfrutaré antes de que me dé ningún disgusto, antes de que sus tíos le enseñen todas esas cosas por las que yo le taparé los oídos.

Se le ve feliz, inmensamente feliz, casi tanto como yo cuando lo miro.

13 comentarios:

  1. Es precioso y muy tierno... pero al mismo tiempo da pena por el temor de esa madre por no saber que va a ser del futuro de su hijo.

    Pienso que ninguna época de la vida es tan tranquila y feliz como la infancia... lástima que cuando nos hacemos mayores apenas se recuerde nada y nos pasemos el tiempo preocupados y frustrados.

    ResponderEliminar
  2. ¡Qué mono el bebé!!!
    Tú última frase me encanta, resume lo que es ser madre de un chiquitín así (y anda que no tienes razón en el resto, xd).

    ResponderEliminar
  3. AIns... me sacaste una lágrima...
    Como madre sé exactamente qué eso.
    Esos sentimientos contradictorias de euforia, orgullo, y miedo a fallarles...

    hermosísimo:D

    kissess

    ResponderEliminar
  4. Supongo que se aprenderá con la marcha, a ser buena madre y a ser buen hijo, pero entiendo que él ya lo tenga fácil, y lo esté haciendo genial con esa carita de ángel.

    Me gustó mucho, es muy reflexivo y cargado de sentimiento.

    Besos!

    ResponderEliminar
  5. creo que todas las madres deben de sentir algo parecido, te ha quedado muy lindo!
    Saludos!

    ResponderEliminar
  6. Es precioso. Precioso, de verdad. Qué manera de describir los sentimientos y cuanto amor se destila hacia el niño! Perfecto, guapa
    Un beso

    ResponderEliminar
  7. ¡¡¡Aaaayyyy!!! Es tan bonito, tan triste y tan bonito.

    ResponderEliminar
  8. Ehm... triste y feliz, era lo que iba a decir. Sus dudas y su alegría.

    ResponderEliminar
  9. Que bonito.... fue lo mismo que pense al escoger esta imagen... observar a un bebe dormido es la mejor esperiencia del mundo y aun mas para una madre.. que bonito

    ResponderEliminar
  10. Super tierno, me ha encantado es muy dulce
    Besos :)

    ResponderEliminar
  11. Es muy precioso, es especial. Me gusta mucho como empleas las frases cortas, siempre he creído que este tipo de frases tienen mucha fuerza. Un beso!

    ResponderEliminar
  12. Hola,

    Precioso. Me ha gustado mucho.
    La foto del bebé es una ricura :)

    Un saludo

    ResponderEliminar
  13. Me ha gustado mucho. Yo también creo que todas las madres se deben sentir igual. Y creo que los padres también.

    Expresas todo muy bien, empleando justo las palabras adecuadas.

    Un saludo!!

    ResponderEliminar